Anita no te rajes

Ficha de Anita no te rajes

Ivonne Montero es Anita Un niña extrovertida y alegre No te rajes Ese es el lema de lucha que desde siempre Ana le oyó decir a La Chayo, y que tras su muerte, adoptó como emblema para su vida. Anita tiene un gran corazón: Es tierna, enérgica, simpática y sonriente. Es impulsiva y genuina en sus reacciones, razón por la cual es a veces un poco torpe. Es muy expresiva al reír como también lo es cuando sufre y no ahorra palabras ni gestos al comunicarse. Cree en el amor incondicional pero en este sentido, por falta de experiencia actúa como una niña. Cree también en la amistad y debido a que no tiene familia, busca en sus amigos ese ambiente familiar. Disfruta el trabajo y por lo tanto no tiene reparo en trabajar donde sea. Sin embargo, su situación legal en este país, limita las posibilidades. Por su comportamiento, a veces infantil e inocente, se enfrenta a los más disparatados problemas y situaciones. En una de ellas, conoce a Eduardo a quien bautiza como su “príncipe”. Y desde ese momento se convierte en su ángel protector Lo que Anita no conoce lo averigua o se lo inventa, porque Anita, nunca se raja.
Descripcion:Ivonne Montero es Anita Un niña extrovertida y alegre No te rajes Ese es el lema de lucha que desde siempre Ana le oyó decir a La Chayo, y que tras su muerte, adoptó como emblema para su vida. Anita tiene un gran corazón: Es tierna, enérgica, simpática y sonriente. Es impulsiva y genuina en sus reacciones, razón por la cual es a veces un poco torpe. Es muy expresiva al reír como también lo es cuando sufre y no ahorra palabras ni gestos al comunicarse. Cree en el amor incondicional pero en este sentido, por falta de experiencia actúa como una niña. Cree también en la amistad y debido a que no tiene familia, busca en sus amigos ese ambiente familiar. Disfruta el trabajo y por lo tanto no tiene reparo en trabajar donde sea. Sin embargo, su situación legal en este país, limita las posibilidades. Por su comportamiento, a veces infantil e inocente, se enfrenta a los más disparatados problemas y situaciones. En una de ellas, conoce a Eduardo a quien bautiza como su “príncipe”. Y desde ese momento se convierte en su ángel protector Lo que Anita no conoce lo averigua o se lo inventa, porque Anita, nunca se raja.